Cerca de lo divino

Te venero y desprecio ethos. En mi ser se ha encarnizado lo salvaje y supremo del hombre, soy una bestia deshumanizada y egoísta. En mi han cohabitado lo iluminado y lo oscuro, lo duro y lo blando, lo accidental e intencionado. Como nunca antes ha vibrado la muerte y el nacimiento, haciéndose presentes en mi instinto el espectador, en mi ojo el observador, en mi hambre el devorador. Mi esquizofrenia estética gira por el escalofriante carrusel de la locura, derramando sangre por lo horrendo y lo bello, por lo trágico y lo cómico, por lo claro y oscuro, perturbando mi psiquismo . Dejando afuera a todo extrangero. El diablo me ha tocado la puerta.